Cubo de Tintín

"Creí que era una aventura y en realidad era la vida" Joseph Conrad.

Qué ¿por qué nos gusta Tintín? Por sus historias, por esa única mezcla de misterios, tesoros, lugares exóticos, gánsteres , científicos, dictadores… nos gusta porque llegó a la luna mucho antes que Neil Armstrong (en Objetivo: la luna y Aterrizaje en la luna) o porque  durante su viaje al Congo viajó con una cámara de cine portátil 8 años antes de que Kodak patentase este objeto.

Dicen los que saben de esto, que el secreto del éxito de Las Aventuras de Tintín y Milú radica en la mezcla de historias potentes con un personaje vacío como Tintín, entendiendo por vacío a un personaje que rara vez muestra sentimientos, del que desconocemos su situación familiar, sentimental o ni tan siquiera su edad, por lo que cualquier lector puede sentirse identificado o proyectado en él.

Pero hagamos un poco de historia. Les aventures de Tintín et Milou se componen de 24 volúmenes, el primero de ellos se publicó en 1929, dentro del suplemento del diario belga de orientación católica  Le Vingtieme Siecle, y el penúltimo en 1976 ( Tintín y los Pícaros). Decimos penúltimo, porque el último, Tintín y el Arte-Alfa no llegó a terminarse, apareciendo solo algunos bocetos del autor.

1942 es un año clave para Hergé y Tintín. Es en ese año cuando se hace la primera historia a color: Tintín y la estrella misteriosa en 1942. En ese mismo año se decide colorear y reeditar los anteriores a esa fecha y también es cuando se reanudaron las publicaciones, ahora en el diario Le Soir, tras dos años de parón debido a la invasión alemana de Bélgica. Entre 1946 y 1966 las aventuras de Tintín se publicaran ya en su propio seminario Tintín y posteriormente dio el salto a los Estados Unidos donde se editaron los últimos números.

Tintín también son cifras mareantes, durante junio de 2013 la casa Artcurial recaudó casi dos millones de euros con la venta de objetos relacionados con Tintín. Valga el ejemplo de una lámina en tinta china de La estrella misteriosa que fue vendida por 202.000 euros. Nuestro viejo cubo, rescatado de una nave abandonada y  pintado completamente a mano, no aspira a tan altas cotas, nos conformamos con que te guste.